Respirar bien para vivir mejor es una apertura al bienestar físico y mental que pide nuestra atención ante el mucho en el que convivimos. La respiración profunda nos beneficia respecto a calmar los estados de alteración, el estrés y ansiedad. Y es que, algo tan simple como lo es respirar hondo genera un beneficio total y de esa manera evitar problema como el carcoma madera.

Respirar profundo logra equilibrar múltiples procesos, proporcionando a su vez una vía de escape a muchas de esas alteraciones negativas que oprimen nuestro día a día. Ya que, forma una gran oportunidad del control sobre nuestro cuerpo, perfeccionando por así decirlo, si practicamos este control de forma inteligente, nuestra calidad de vida.

Científicamente, ¿Cómo nos ayuda la respiración profunda?

Estudios científicos se refieren a que una respiración lenta, es que lo que más beneficia a nuestro cuerpo, por ejemplo, cuando respiramos profundamente, pero sobre todo con lentitud, logramos que el oxígeno llegue efectivamente a las células y que no se pierda el nivel del CO2 sanguíneo.

A su vez, también se ha determinado de que el tipo de respiración que más nos favorece es la respiración diafragmática: esa en la que tomamos aire en profundidad, dejando que ingrese por la nariz y llene totalmente los pulmones, al rellenar la parte baja de nuestro abdomen.

Beneficios curativos que nos ofrece la respiración

Para disfrutar de sus virtudes sólo hay que ser sensatos de ello al momento de respirar profundamente, direccionando la mentalidad hacia que nos ayuda a limpiar los pulmones y a eliminar sustancias tóxicas que dañan el organismo. Además, ayuda a controlar el estrés y aclara la mente en momentos difíciles, es decir nos ayuda a purificar y a tranquilizarnos.

Cuando se menciona tranquilizarnos, es referente a que es una muy buena técnica para cuando se está molesto, estresado o con ansiedad. Y es que, la técnica de respirar profundamente diez veces, antes de decir algo o tomar alguna decisión importante, se evita la ira y los impulsos nos hagan ser presos de nuestras propias emociones.

Además de ofrecernos otros tipos de beneficios como: el mejoramiento del metabolismo celular de nuestro cuerpo, las digestiones son menos pesadas, mejoraría nuestro eje postural y tendríamos menos dolores de espalda, contribuye a la disminución de sentir menos dolor muscular, menos cefaleas y migrañas. Por otro lado, ayuda a mejorar la concentración relacionada a los estudios.

Además, es el canal más efectivo para ayudarnos a gestionar mejor el estrés y la ansiedad, a estar más centrados en el aquí y ahora, y por supuesto a dormir mejor.

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